El término descadillar se refiere a la acción de quitar a la lana los cadillos, que son pequeñas bolitas o impurezas, así como las pajillas o motas que pueden estar presentes.
Este proceso es fundamental en la preparación de la lana para su uso, ya que asegura que el material sea más limpio y de mejor calidad.
Al descadillar, se mejora la apariencia y la textura de la lana, haciéndola más adecuada para su posterior procesamiento.