El término descarrilar se refiere principalmente a la acción de que un vehículo, como un tren o un tranvía, salga de su carril o vía.
Este fenómeno puede ocurrir por diversas razones, como fallos mecánicos o condiciones adversas en el entorno.
Además de su uso en el ámbito del transporte, la palabra también puede emplearse de manera figurada para describir situaciones que se desvían de su curso normal o esperado.