La descongestión se refiere a la acción y efecto de descongestionar, es decir, liberar o aliviar una situación que está sobrecargada o bloqueada.
Este término se utiliza en diversos contextos, como en la salud, donde puede referirse a la reducción de la congestión nasal, o en el ámbito urbano, aliviando el tráfico en calles saturadas.
En esencia, la descongestión busca facilitar el flujo y mejorar la calidad de vida.