El término desembarrancar se refiere principalmente a la acción de desencallar o sacar a flote un barco que ha quedado atrapado en el fondo o en un lugar poco profundo.
Esta palabra evoca la idea de liberar una embarcación que, por diversas razones, no puede navegar libremente.
En este contexto, desembarrancar implica un esfuerzo por devolver al barco a su estado de flotabilidad y movilidad en el agua.