El término desencordelar se refiere a la acción de quitar los cordeles que sujetan o atan un objeto.
Esta práctica es común en situaciones donde se necesita liberar algo que ha sido asegurado con cuerdas, ya sea para facilitar su uso, transporte o simplemente para deshacer un nudo.
Desencordelar implica un proceso de desatado que permite recuperar la funcionalidad del objeto en cuestión.