El término desenfardar se refiere a la acción de abrir y desatar los fardos, que son paquetes o bultos generalmente atados.
Este verbo implica liberar el contenido de un envoltorio, permitiendo acceder a lo que se encuentra dentro.
Aunque su uso es más común en contextos relacionados con el transporte o almacenamiento de mercancías, también puede tener connotaciones figurativas en situaciones donde se busca revelar o descubrir algo oculto.