Desidia es un término que se refiere a la falta de interés, cuidado o diligencia en la realización de una tarea o responsabilidad. Se manifiesta como una actitud de indiferencia o apatía hacia las obligaciones, lo cual puede resultar en la negligencia o postergación de actividades importantes.
La desidia puede estar asociada con la falta de motivación, la desgana o la pereza, y suele tener un impacto negativo en el cumplimiento de metas y objetivos. Esta actitud puede afectar tanto el ámbito personal como el profesional, generando consecuencias adversas en el desarrollo de tareas, proyectos o relaciones interpersonales.
La desidia se manifiesta a través de la inacción, la procrastinación y la falta de compromiso, lo que puede derivar en resultados insatisfactorios o incompletos.
Ejemplos de uso: "La desidia de algunos empleados está afectando el rendimiento general de la empresa"
"Su desidia para mantener su casa en orden ha generado problemas con sus vecinos"
"La desidia de los estudiantes se refleja en la falta de entrega de tareas y bajo rendimiento académico"
"La desidia de las autoridades ha llevado a un deterioro evidente en la infraestructura urbana".
Origen etimológico de desidia: proviene de la palabra latina desidia
Tiene su acento prosódico (sin tilde) en la sílaba: si Tipo de acentuación de desidia: Palabra grave (también llana o paroxítona). Posee diptongo creciente ia.
Pronunciación de desidia
Pronunciación (AFI): [ deˈsi.ðja ]
Cantidad de letras, vocales y consonantes de desidia
Palabra inversa: aidised Número de letras: 7 Posee un total de 4 vocales: e i i a Y un total de 3 consonantes: d s d
¿Es aceptada "desidia" en el diccionario de la RAE?