El término desmadrinarse se utiliza en el ámbito del español de Argentina para referirse al acto de desamorarse.
Este verbo captura la esencia de una experiencia emocional donde se pierde el amor o el afecto hacia alguien.
A menudo, implica un proceso de distanciamiento emocional que puede ser gradual o repentino, reflejando la complejidad de las relaciones humanas y sus altibajos.