El término desmedrado se utiliza para describir a alguien que se encuentra en un estado de debilidad o fragilidad.
Se refiere a personas que, por diversas razones, presentan un aspecto enclenque o flaco, lo que puede ser resultado de problemas de salud, desnutrición o falta de cuidados.
Esta palabra evoca una imagen de vulnerabilidad, destacando la necesidad de atención y apoyo para recuperar la fortaleza y el bienestar.