El término despechugar tiene dos acepciones principales.
En su uso más literal, se refiere a la acción de quitar la pechuga a un ave, un proceso común en la preparación de alimentos.
Sin embargo, en un sentido más figurado y coloquial, significa dejar al descubierto el pecho y la garganta, generalmente por falta de cuidado o desaliño.
Ambas acepciones reflejan una relación con la exposición y la transformación.