El término desrostrar se refiere a la acción de herir en el rostro.
Esta palabra es considerada una acepción anticuada y actualmente se encuentra en desuso.
Aunque su significado puede evocar imágenes de conflictos o agresiones, su uso en el lenguaje contemporáneo es muy limitado, lo que la convierte en un ejemplo interesante de cómo el idioma evoluciona y ciertas palabras caen en el olvido.