La palabra destorpadura se refiere a la acción y efecto de afear o estropear algo.
Aunque hoy en día su uso es poco común y se considera en desuso, su significado evoca la idea de deterioro o daño estético.
Este término, que puede encontrarse en textos antiguos, refleja una preocupación por la apariencia y el estado de los objetos o situaciones, resaltando la importancia de la estética en la percepción humana.