El término destronar se refiere principalmente a la acción de deponer o echar del trono a un monarca, lo que implica un cambio de poder en el ámbito real.
Sin embargo, su uso no se limita a la realeza; también se aplica en un sentido figurado, donde significa quitar a alguien su preponderancia o posición de privilegio en cualquier contexto, ya sea social, político o profesional.