El término desucar proviene del ámbito de la química y se refiere a la acción de desjugar, es decir, extraer el jugo de un material.
Esta palabra se utiliza en contextos donde se busca obtener el líquido esencial de frutas, verduras u otros elementos, eliminando así su contenido azucarado.
En definitiva, desucar implica un proceso de transformación que permite acceder a la esencia líquida de los productos.