El término desvalijar se refiere principalmente al acto de robar algo, ya sea de manera directa o a través de métodos engañosos.
En su sentido más amplio, implica despojar a alguien de sus pertenencias, ya sea mediante un robo físico o a través de artimañas como el juego o el engaño.
Este verbo evoca una sensación de pérdida y vulnerabilidad, reflejando la gravedad del acto de quitarle a otro lo que le pertenece.