La disolubilidad se refiere a la capacidad que tiene una sustancia para disolverse en un líquido, formando una solución.
Esta propiedad es fundamental en diversos campos, como la química, la farmacia y la biología, ya que influye en cómo interactúan los compuestos entre sí.
La disolubilidad determina la eficacia de medicamentos y la disponibilidad de nutrientes en los organismos, siendo un concepto clave en el estudio de las soluciones.