El término dragomán se refiere a un intérprete que traduce de viva voz entre diferentes lenguas.
Históricamente, esta figura ha sido fundamental en contextos diplomáticos y comerciales, facilitando la comunicación entre culturas diversas.
Los dragomanes no solo dominan el idioma, sino que también comprenden las sutilezas culturales, lo que les permite transmitir no solo palabras, sino también significados y matices.