El término dulzón o dulzona se utiliza en el lenguaje coloquial para describir algo que resulta empalagoso.
Esta palabra evoca una sensación de excesiva dulzura o un comportamiento que puede resultar demasiado meloso o sentimental.
En diversas situaciones, puede referirse tanto a sabores como a actitudes, sugiriendo que algo o alguien ha sobrepasado el límite de lo agradable, convirtiéndose en un tanto cansino.