El término embochinchar se utiliza en América Latina para referirse a la acción de promover un bochinche o alboroto.
Esta palabra evoca la idea de generar un ambiente de confusión o desorden, donde las cosas se descontrolan y se crea un revuelo.
Su uso refleja la cultura y el lenguaje coloquial de la región, destacando la importancia de la interacción social y las dinámicas grupales en la vida cotidiana.