El término embolismal se refiere a un año que presenta trece lunaciones, es decir, un ciclo lunar adicional en comparación con el año solar habitual.
Este fenómeno ocurre en calendarios que siguen el ritmo de las fases de la luna, como el calendario hebreo o el islámico.
La inclusión de un mes extra permite alinear el calendario con las estaciones y los ciclos agrícolas, reflejando así la importancia de la luna en la medición del tiempo.