El término embracilado o embracilada proviene del participio del verbo embracilar.
En un contexto familiar, se refiere a los niños que son llevados constantemente en brazos por sus madres u otras personas.
Esta expresión refleja una forma de cuidado y afecto, donde el niño se encuentra en un estado de cercanía y protección, destacando la relación íntima entre el adulto y el pequeño.