La palabra eminentemente se utiliza para describir algo que se realiza de manera excelente o con una alta perfección.
Este adverbio también puede referirse a la idea de poseer una cualidad en un grado notable, lo que implica una eminencia en el contexto en que se aplica.
En filosofía, sugiere un estado de ser que tiene un potencial o una virtualidad significativa, destacándose por su importancia o relevancia en diversas situaciones.