El término empantalonarse tiene su origen en el uso popular de Puerto Rico, donde se refiere a la acción de envalentonarse o adquirir valor y confianza para enfrentar situaciones difíciles.
Esta expresión refleja un cambio de actitud, donde una persona se siente más audaz y decidida.
Así, empantalonarse no solo implica un acto físico, sino también una transformación emocional que permite a alguien actuar con mayor seguridad.