El término empiadar es una palabra de uso antiguo que se relaciona con el verbo apiadar.
Su significado implica causar piedad o despertar sentimientos de compasión en los demás.
Aunque hoy en día su uso es muy poco frecuente, su etimología y conexión con la empatía nos recuerdan la importancia de la sensibilidad hacia el sufrimiento ajeno.
Esta acepción refleja una época en la que el lenguaje era más rico en matices emocionales.