El término empizcar es un verbo que se encuentra en desuso y se refiere a la acción de azuzar, es decir, incitar a los perros para que acometan.
Esta acepción, aunque antigua, evoca una práctica relacionada con el control y la dirección de los animales, destacando su uso en contextos específicos del pasado.
Hoy en día, su significado ha caído en desuso, pero sigue siendo un ejemplo interesante de la evolución del lenguaje.