El término enceldar se refiere a la acción de encerrar a alguien en una celda, un espacio reducido y cerrado, generalmente utilizado en contextos de detención o castigo.
Esta práctica puede asociarse a instituciones como cárceles o monasterios, donde se busca aislar a una persona por diversas razones.
Así, enceldar implica no solo la limitación de la libertad física, sino también un impacto en el bienestar emocional del individuo.