El término encielar se utiliza principalmente en Chile y se refiere a la acción de poner un cielo a una estructura, como un templo o una casa.
Esta práctica implica la instalación de un techo o cubierta que protege el interior de las inclemencias del tiempo, creando un espacio más habitable y acogedor.
Así, encielar no solo tiene un significado arquitectónico, sino que también contribuye a la funcionalidad y estética de los edificios.