El término enemigadero y su variante enemigadera se refieren a una cualidad de ser propenso a discordias y enemistades.
Aunque hoy en día estas palabras son consideradas anticuadas y están en desuso, evocan una imagen de personas o situaciones que fomentan conflictos y divisiones.
Su uso refleja una época en la que las relaciones interpersonales eran más susceptibles a la hostilidad y la rivalidad.