El término ensangostido o ensangostida se refiere a un estado de angustia o aflicción, aunque hoy en día es considerado una palabra anticuada y en desuso.
Su uso evoca una sensación profunda de malestar emocional, similar a la que se experimenta en momentos de gran tensión o preocupación.
Aunque su significado ha caído en desuso, sigue siendo un ejemplo interesante de cómo el lenguaje evoluciona con el tiempo.