Los eritrocitos, también llamados hematíes, son glóbulos rojos que desempeñan un papel crucial en el transporte de oxígeno desde los pulmones a los tejidos y órganos, así como en la eliminación del dióxido de carbono desde los tejidos hacia los pulmones.
Esta función es posible gracias a la hemoglobina, una proteína rica en hierro presente en el interior de los eritrocitos, que se une tanto al oxígeno como al dióxido de carbono.
Los eritrocitos, también conocidos como hematíes, son células sanguíneas encargadas del transporte de oxígeno desde los pulmones hacia los tejidos y órganos del cuerpo, y del retorno de dióxido de carbono desde estos tejidos hacia los pulmones para su eliminación.
Esta función vital es posible gracias a la hemoglobina, una proteína rica en hierro que se encuentra en el interior de los eritrocitos y que tiene la capacidad de unirse tanto al oxígeno como al dióxido de carbono.
La forma característica de los eritrocitos es bicóncava, lo que les proporciona una mayor superficie para el intercambio de gases y les permite deformarse fácilmente para pasar a través de los capilares más estrechos.
En los seres humanos, estas células carecen de núcleo y otros orgánulos en su etapa madura, lo que maximiza el espacio disponible para la hemoglobina.
La producción de eritrocitos se lleva a cabo en la médula ósea mediante un proceso llamado eritropoyesis. Este proceso está regulado por la hormona eritropoyetina, que es producida principalmente por los riñones en respuesta a niveles bajos de oxígeno en la sangre.
El ciclo de vida promedio de un eritrocito es de aproximadamente 120 días. Al final de su vida útil, los eritrocitos son eliminados del torrente sanguíneo por el bazo y el hígado, donde sus componentes son reciclados para formar nuevos glóbulos rojos o se excretan del cuerpo.
Los niveles anormales de eritrocitos pueden indicar diversas condiciones médicas. Un exceso de eritrocitos, conocido como policitemia, puede ser causado por enfermedades pulmonares crónicas o deshidratación. Por otro lado, una deficiencia en el número de eritrocitos, conocida como anemia, puede resultar de deficiencias nutricionales, pérdida excesiva de sangre o trastornos genéticos.
De izquierda a derecha: eritrocito, trombocito, leucocito. CC
Origen etimológico de eritrocito: proviene de la palabra griega antigua ἐρυθρός (que significa "rojo") y κύτος (que significa "contenedor, cuerpo").
Segundo diccionario: eritrocito
m. Zool. Hematíe. [|| m. Zool. Glóbulo rojo que nada en el plasma de los animales de sangre caliente. Da el color rojo característico de la sangre. ver: hematíe]
• « La hemoglobina es la proteína de la sangre contenida en los eritrocitos y encargado del transporte de oxígeno de los pulmones a los tejidos. » (de eritrocito | plural)