El término escorir es una palabra de uso anticuado que se refiere a la acción de escurrir, es decir, eliminar el líquido de un objeto o sustancia.
Aunque su uso ha caído en desuso, todavía se puede encontrar en algunas regiones, como en Cantabria.
Esta acepción refleja la riqueza del vocabulario español y su evolución a lo largo del tiempo, mostrando cómo ciertas palabras pueden quedar relegadas a contextos específicos.