El término escrupulete se refiere de manera coloquial a una persona que muestra un exceso de escrúpulos, es decir, que vive con dudas o recelos que le generan inquietud y desasosiego.
Este tipo de individuo tiende a preocuparse en demasía por cuestiones morales o éticas, lo que puede afectar su tranquilidad y su capacidad para tomar decisiones.
En definitiva, ser un escrupulete implica una constante lucha interna con sus propios principios.