La esmaltina es un compuesto químico, específicamente un arseniuro de cobalto, que se utiliza principalmente en la fabricación de esmaltes.
Este material es apreciado por su capacidad para aportar color y brillo a diversas superficies, convirtiéndose en un elemento esencial en la industria de la cerámica y la pintura.
Su uso permite crear acabados atractivos y duraderos, destacando su importancia en el ámbito artístico y decorativo.