El término espiroquetales se refiere a un orden de microorganismos que se caracterizan por su forma alargada y flexuosa, presentando una estructura en espiral con al menos un giro completo.
Estos organismos se mueven de manera serpenteante y no se conocen formas de esporas.
Se dividen en dos clases: las saprofitas, que habitan en ambientes como el agua y el barro, y las parásitas, que pueden causar enfermedades en humanos y animales, como la espiroquetosis en aves.
Este orden consta de microorganismos finamente alargados, flexuosos, en forma de espiral, con un giro completo por lo menos. Todos se desplazan con un movimiento serpenteante o giratorio. No se sabe que formen esporas. Algunos producen un filamento axial; otros, una cresta lateral; otros, estrías transversales. La multiplicación se hace por fisión transversal. No se les conoce ciclo sexual. Generalmente se tiñen mal con los colorantes bacteriológicos ordinarios y se observan mejor en campo oscuro. La mayoría de las especies se desarrollan muy poco o no se desarrollan en absoluto en medios de laboratorio. Se dividen en dos clases: las saprofitas, que se encuentran en el agua, el barro y las vías intestinales de los moluscos, y las parásitas, productoras de enfermedades en el hombre y los animales. Son géneros y especies típicos los siguientes:
Borrelia anserina, produce la espiroquetosis en las aves.
Cristispira balbianii, parásito del tubo digestivo de los moluscos.
Leptospira icterohaemorrkagiae, causante de la ictericia infecciosa en el hombre.
Spirochaeta plicatilis, presente en las aguas dulces y saladas.
Treponema pallidum, causa la sífilis en el hombre.