El término execramento se refiere a una acción o efecto de execrar, que implica condenar o rechazar algo con gran fuerza.
Aunque su uso es considerado anticuado y actualmente se encuentra en desuso, su significado evoca la idea de una execración, es decir, una manifestación intensa de desprecio o aversión.
Así, el execramento representa una forma de expresar desdén hacia algo que se considera profundamente negativo.