El término exigidero y su forma femenina exigidera se utilizan para describir algo que es exigible, es decir, que puede o debe ser demandado o reclamado.
Estas palabras reflejan la idea de que ciertas condiciones, derechos o responsabilidades son susceptibles de ser solicitados, destacando la importancia de la obligatoriedad en diferentes contextos.
Su uso es común en ámbitos legales y administrativos, donde la claridad en las exigencias es fundamental.