El término exorcizante se refiere a algo que tiene la capacidad de exorcizar, es decir, que puede liberar o expulsar a un espíritu maligno o una influencia negativa de una persona o lugar.
Este concepto está profundamente arraigado en diversas tradiciones religiosas y espirituales, donde se busca restaurar la paz y la armonía a través de rituales específicos.
Así, lo exorcizante se convierte en un elemento clave en la lucha contra lo que se considera maligno o perturbador.