Facultado y facultada son términos derivados del verbo "facultar".
Se refieren a la acción de otorgar autoridad o permiso a alguien para llevar a cabo una determinada tarea.
En este sentido, quien está facultado o facultada cuenta con la capacidad legal o el poder necesario para realizar una acción específica.
Por ejemplo, un juez puede facultar a un abogado para representar a un acusado en un juicio, lo que le confiere la autoridad necesaria para actuar en nombre de esa persona en el proceso legal.
p. Facultado (facultada) es una palabra que se forma a partir del participio del verbo "facultar".
Este participio es una forma no personal del verbo, pero se puede usar como adjetivo conservando su función verbal.
Por ejemplo: "El juez ha facultado al abogado para representar al acusado".
En esta oración, "facultado" se utiliza como un adjetivo que describe al abogado y se refiere a la acción que le ha permitido ejercer su función como representante legal.
Es importante mencionar que, al ser un participio, "facultado" siempre denota tiempo pasado y acción completada.
Por ejemplo: "Luego de haber sido facultado para tomar decisiones, el empleado procedió con las medidas necesarias".
Aquí, "facultado" se utiliza en el tiempo perfecto y describe una acción que ya ha sido realizada.
Además, "facultado" también se puede usar en la voz pasiva y para formar oraciones subordinadas.
Por ejemplo: "El comité fue facultado para tomar la decisión final" o "Una vez que esté facultado para realizar el trabajo, podré comenzarlo sin problemas".
En resumen, "facultado" es un participio que se utiliza como adjetivo y denota una acción ya realizada en tiempo pasado.
Se puede usar en la voz pasiva y en oraciones subordinadas.
Etimología u origen de la palabra facultado: participio del verbo «facultar» que se construye modificándolo así: facultado