La palabra finolis se utiliza para describir a una persona que se muestra fina y, a menudo, pedante.
Este término puede referirse tanto a su comportamiento como a su forma de hablar, sugiriendo una actitud de superioridad o pretensión.
En contextos familiares, se emplea para señalar a aquellos que buscan destacar por su elegancia o refinamiento, pero que pueden resultar excesivos o artificiales en su manera de ser.