Flamígero/a se utiliza para describir algo que emite llamas, ya sea de forma literal o figurativa.
Puede referirse a objetos que producen fuego o a descripciones poéticas que evocan la imagen de llamas.
En el contexto del arte gótico, específicamente en el siglo XV, se refiere al estilo gótico flamígero, caracterizado por elementos decorativos y estructurales con formas ondulantes y puntiagudas que recuerdan a las llamas.
Este período se distingue por una ornamentación exuberante y diseños complejos.
La palabra "flamígero/a" en este contexto se utiliza para describir algo que literalmente emite, expulsa o está acompañado de llamas.
Este término puede aplicarse tanto a objetos inanimados, como antorchas o estructuras diseñadas para producir fuego, como a descripciones más poéticas o figurativas que evocan la imagen de llamas.
Ejemplos de uso: "El dragón flamígero se alzó sobre el horizonte, iluminando la noche con su fuego".
"La antorcha flamígera guiaba el camino a través de la oscuridad de la cueva".
Se aplica al último período (siglo XV) del estilo gótico cuando los contornos lanceolados recuerdan las llamas.
En este sentido, "flamígero/a" se refiere a una característica específica del arte y la arquitectura, particularmente durante el último período del estilo gótico, conocido también como gótico flamígero.
Este término describe los elementos decorativos y estructurales que presentan formas ondulantes y puntiagudas que recuerdan a las llamas, lo cual es distintivo de este período artístico. La ornamentación exuberante y los diseños complejos son características clave de este estilo.
Ejemplos de uso: "La catedral está adornada con vidrieras y arcos flamígeros, típicos del gótico tardío".
"Los detalles flamígeros en la fachada del edificio le otorgan una belleza única, recordando el movimiento de las llamas".
Segundo diccionario: flamígero
Origen de la palabra: (latín flammiger, -era; deflamma, llama, y gerére, llevar.)
• « A Hong Kong, Singapur, Taiwán y Corea del Sur, los llamados Pequeños Dragones hasta que llegaron a la mayoría de edad en la década de los setenta, se les ha unido una nueva generación de criaturas con aliento flamígero: Tailandia, Malasia e Indonesia. »