El término fornir tiene un significado que ha caído en desuso, ya que se trata de una forma antigua de expresar el verbo fomecer, que implica proporcionar o abastecer.
Además, en un contexto más específico, se relaciona con el verbo germánico que significa arreciar o reformar.
Aunque su uso es escaso hoy en día, su etimología y acepciones reflejan la evolución del lenguaje y las transformaciones en la comunicación a lo largo del tiempo.