El término fradar se utiliza en algunas regiones de España, como Asturias y Cantabria, para referirse a la acción de afrailar o podar un árbol de manera drástica, eliminando todas sus ramas.
Esta práctica puede tener como objetivo rejuvenecer el árbol o prepararlo para un nuevo ciclo de crecimiento.
La palabra refleja una tradición agrícola que busca optimizar la salud y producción de los árboles en estas áreas.