Una fregación es una acción que consiste en frotar o friccionar una superficie.
Esta palabra, de uso antiguo y poco común en la actualidad, se refiere al acto de fregar o limpiar algo mediante la fricción.
Aunque su significado ha caído en desuso, originalmente se empleaba para describir el proceso de frotar o restregar una superficie con el fin de limpiarla o pulirla.