La palabra froga se refiere a una fábrica de albañilería, especialmente aquella construida con ladrillos, en contraste con la sillería, que utiliza piedras talladas.
Esta acepción es considerada anticuada y actualmente se encuentra en desuso, lo que refleja la evolución del lenguaje y las técnicas de construcción a lo largo del tiempo.
Aunque su uso ha disminuido, su significado nos conecta con prácticas arquitectónicas del pasado.