El término frutaje se refiere a una forma de pintura que representa principalmente frutas y flores.
Esta técnica artística busca capturar la belleza y la esencia de la naturaleza a través de la representación visual de estos elementos, creando composiciones que celebran la riqueza y la diversidad del mundo vegetal.
El frutaje no solo es un deleite para la vista, sino que también invita a la reflexión sobre la relación entre el arte y la naturaleza.