La palabra fúgido (y su forma femenina fúgida) se refiere a algo que es fugaz, es decir, que dura poco tiempo o que se escapa rápidamente.
Aunque hoy en día su uso es poco común y se considera una acepción anticuada, todavía puede encontrarse en la poesía, donde evoca la belleza de lo efímero.
Su significado resalta la naturaleza transitoria de ciertas experiencias o momentos, recordándonos la importancia de apreciar lo que es breve.