La fumigación es un proceso que consiste en aplicar sustancias químicas en forma de vapor o aerosol con el objetivo de eliminar plagas, bacterias o contaminantes del ambiente.
Esta técnica se utiliza para purificar el aire y mejorar la calidad de los espacios, ya sea en hogares, jardines o instalaciones industriales.
La fumigación es esencial para mantener un entorno saludable y libre de riesgos para la salud.