El término fumigador se refiere principalmente a un aparato diseñado para fumigar, es decir, para aplicar sustancias químicas en forma de vapor o aerosol con el fin de eliminar plagas, enfermedades o insectos en cultivos y espacios cerrados.
Su uso es fundamental en la agricultura y la sanidad pública, ya que ayuda a mantener la salud de las plantas y a prevenir la propagación de enfermedades.