La fumosidad se refiere a la materia que se encuentra en el humo, una mezcla de partículas sólidas y gases que se producen al quemar sustancias.
Este término evoca la presencia de elementos que pueden ser perjudiciales para la salud y el medio ambiente.
La fumosidad no solo describe la calidad del humo, sino que también puede implicar la contaminación y el impacto de los procesos de combustión en nuestro entorno.