La galbana es una expresión que refleja la falta de interés o energía para llevar a cabo labores o responsabilidades.
Se caracteriza por una actitud de pereza o desgana hacia el trabajo y las obligaciones propias de una posición o cargo.
Es la resistencia al esfuerzo y la renuencia a cumplir con las tareas asignadas, mostrando una clara falta de motivación para realizar las actividades laborales correspondientes.
f. fam. Pereza, repugnancia al trabajo, al esfuerzo, a cumplir las obligaciones del cargo de cada uno.
La galbana es un término que se utiliza para describir una sensación de pereza o desgana hacia el trabajo o las responsabilidades.
Esta actitud se manifiesta como una falta de motivación para realizar tareas laborales o cumplir con las obligaciones propias de un cargo o posición.
La galbana puede estar asociada a la apatía, la desidia y la falta de compromiso, lo que puede afectar negativamente el rendimiento laboral y la productividad.
La galbana puede manifestarse de diversas formas, desde la procrastinación hasta la evasión activa de responsabilidades.
Quienes experimentan galbana tienden a buscar excusas para evitar el trabajo o buscan atajos para cumplir con sus obligaciones de manera superficial. Esta actitud puede generar tensiones en el entorno laboral y afectar las relaciones interpersonales.
Ejemplos de uso: "Hoy me levanté con una galbana tremenda, no tengo ganas de hacer nada"
"Su constante galbana le impide avanzar en su carrera profesional"
"La galbana se apoderó de mí y no pude cumplir con mis responsabilidades laborales".
Segundo diccionario: galbana
Origen de la palabra: (del árabe gabana, tristeza, descontento, desánimo.)